miércoles, 25 de febrero de 2015

RIO RICO


Río Rico es un poblado que se encuentra en la ribera sur del Río Bravo, pertenece al municipio de Matamoros, Tamaulipas, aunque no siempre fue así, porque formó parte del estado norteamericano de Texas.
Esta comunidad se encontró involucrada en un incidente internacional, que por 63 años mantuvo un limbo legal respecto al status definitivo de una extensión de tierra y de un grupo de personas, quienes requirieron de un tratado internacional para determinar en definitiva la pertenencia de una franja de tierra en el primer caso y en el segundo de una nacionalidad.
Río Rico perteneció al estado de Texas, fue una comunidad que se encontraba dentro de la jurisdicción del condado de Hidalgo, en la ribera norte del río Grande, como así le llaman los norteamericanos. Los planos de la época ubican a esta comunidad en el interior de una curva extremadamente pronunciada y larga, como una especie de dedo, que pareciera introducirse en territorio mexicano, concretamente, en Tamaulipas. Río Rico se encontraba casi al fondo de esa curva, en la orilla del río.
A principio del siglo XX, en el sur de Texas, había una considerable actividad para obtener tierras de riego en la planicie del denominado Magic Valley. Una empresa denominada American Rio Grande Land & Irrigation Company, realizó obras en el sector de Río Rico, que culminaron en un considerable cambio en el cauce del río, afectando a esta ciudad.
Las obras de la empresa norteamericana consistieron en abrir un nuevo canal, que permitió unir las bases de la curva, para hacer recto en ese sitio el cauce del río, desapareciendo así, la curva donde se encontraba Río Rico y trasladando con ello a esta localidad del lado norte de la ribera del río Bravo, al lado sur.
Este evento aconteció en el mes de julio de 1906, en franca violación al tratado entre México y los EU, por un particular. En consecuencia, se vieron afectados 413 acres de tierra que conformaban la parte interior de la curva del río, lo que provocó que la empresa se viera emplazada a un juicio, ésta fue llevada a corte y multada, sin embargo, inexplicablemente y por razones que desconozco, el daño al cauce del río se quedó tal y como lo dejó la compañía en cuestión.
Lo extraño es que sorprendentemente, ninguno de los dos países, tanto México como los Estados Unidos, en lo inmediato y hasta varias decenas de años adelante, no ejercieron la invocación de derechos sobre la zona del Horcón o El Horcón, nombre con el que era conocido el meandro del río en cuestión.
La aplicación de los derechos territoriales sobre El Horcón, en virtud de los tratados de Guadalupe Hidalgo, que concluyen con la injusta guerra de intervención por parte de los Estados Unidos contra la República Mexicana, (1846-1848) señalaron el canal principal que constituye el río Bravo, como la frontera entre ambos países. Estos derechos correspondían en todo caso a los Estados Unidos, quienes nunca abandonaron formalmente sus atribuciones sobre el lugar, agregando que incluso, que los tratados sobre derecho internacional, precisan que solamente los cambios naturales sobre el curso de un río, pueden transferir el territorio de una soberanía a otra.
Sin embargo, pese a lo anterior, Río Rico vino a ser administrado paulatinamente por el gobierno mexicano, incluso y contradictoriamente, se construyó un puente internacional, en 1928, entre el condado de Hidalgo y el municipio de Matamoros, precisamente, este puente unió a las comunidad de Mercedes con Río Rico, que se encontraban para entonces definitivamente separadas por el río.
En el año de 1928, el gobierno de los Estados Unidos, autorizó a la empresa P&P Bridge Company, a construir un puente sobre el río Bravo en una ubicación cerca del pueblo de Weslaco, Texas, los gobiernos de ambos países concluyeron que en el sitio en mención fuera señalado como referencia el poblado de Río Rico entonces en la margen sur del río, que podía considerarse como dentro de México.
Dicha construcción consistió en puente colgante que podríamos ubicarlo a dos millas en sentido descendente, de la Villa de Nuevo Progreso, en el municipio de Río Bravo, hacia el oriente, siguiendo la corriente del río.
Este puente tenía unas torres en las riberas del río, de estas torres partían unos cables de acero, paralelos a ambos lados del puente, estos cables sostenían a su vez unos cables perpendiculares más pequeños que eran los que soportaban la base de madera de 260 pies de largo, que era por donde transitaban vehículos y personas. Este puente fue destruido por una crecida del río Bravo en el año de 1941.
Posterior a la crecida del río, se construyó un puente de pontones que demostró ser insatisfactorio, este estuvo en funcionamiento hasta 1946, en el mismo lugar donde se había construido el de tirantes.
En el año de 1951, con la participación del gobierno mexicano y el de los estados unidos, la construcción del primer puente de acero fue comenzada, el cual fue terminado en 1952, pero su ubicación fue cambiada a unos seis kilómetros arriba de Río Rico, en la localidad de Progreso Texas, que motivó el desarrollo del poblado de Nuevo Progreso, Tamaulipas.
El asunto del Horcón se fue perdiendo entre los altos intereses de ambas naciones, sin embargo, no fue sino hasta el año de 1967 cuando un profesor de geografía de la Universidad de Arizona, el maestro James Jr., descubrió el incidente del cambio territorial de Río Rico mientras estudiaba un viejo mapa geológico de la región.
No fue hasta el año de 1972, después de que la comisión de límites de los Estados Unidos y el departamento de Estado de aquella nación, confirmaran el incidente de Río Rico de 1906, el gobierno norteamericano cedió oficialmente El Horcón y por ende Río Rico, a la República Mexicana.
El acuerdo internacional significó el resarcimiento por parte de México, a los Estados unidos de 461.8 acres o sea 194.93 hectáreas, que de acuerdo al tratado, corresponden al área geográfica de El Horcón. Para ello, se determinó un punto en el área de Hidalgo-Reynosa, donde se excavó un canal de tres kilómetros de longitud, con la finalidad de modificar el curso del río Bravo, para resarcir a los norteamericanos el incidente de 1906.
Es necesario señalar que el asunto de Río Rico no terminó para los habitantes de esa comunidad, en el año de 1972, un habitante de Río Rico, el señor Homero Cantú Treviño, fue detenido por autoridades norteamericanas de inmigración por su estatus de permanencia ilegal en el estado de Texas. Con la finalidad de evitar su eventual deportación a México, el señor Treviño alegó que él era un ciudadano norteamericano, por lo que inició un juicio en el que en 1976, un juez determinó que no había lugar a la reclamación del invocante, sin embargo, éste continuó con su reclamo ante instancias superiores.
En 1977 una corte superior concluyó que el reclamo del ríorriquense era efectivamente correcta y apegada a derecho, en virtud de que el incidente de 1906, donde el río Bravo cambió su curso por intervención de una compañía, la corte determinó que los ciudadanos nativos de Río Rico entre 1906 y 1972, podían efectivamente, reclamar su derecho a obtener la ciudadanía de los Estados Unidos.

En la actualidad, Río Rico es apenas un puñado de casas, no hay restos del poblado antiguo y del puente colgante, aunque las referencias populares nos remiten a un pueblo pujante y boyante en la década de los años 30, que contaba con muchos habitantes, comercios, cantinas, hasta un casino y un galgódromo a donde se dice que acudía a divertirse el tristemente célebre mafioso Al Capone.